CAMINO DE LA GEIRA - Etapa 6

CORTEGADA - BERÁN

25/08/2024

Datos Técnicos
DescripciónDatosDescripciónDatos
TramoCortegada-BeránDistancia23,30 Kms.
Acumulado Subiendo551 m.Altura Máxima1043 m.
Acumulado Bajando418 m.Altura Mínima68 m.
Duranción6:10 horas

La Ruta

Magnífica etapa llena de elementos interesantes la que nos conducirá de la ciudad balneario de Cortegada a Berán, ya que nos llevará un tiempo más que bien empleado las visitas a Meréns, con su flamante mayor escudo de Galicia, la obligada visita a Ribadavia, antigua capital del reino de Galicia, o Beade, con su espectacular calvario y capela de San Roque. Además, hoy por primera vez entraremos de lleno en el Camiño dos Arrieiros, antiguo camino utilizado en el medievo, sobre todo en el margen izquierdo del río Avía, para transportar el vino ribeiro en primera instancia a Santiago de Compostela y desde allí a zonas de la cornisa cantábrica, de allí a Inglaterra e incluso como documentado, a América de la mano de Cristóbal Colón.

Datos de Interés

PoblaciónKms.A SantiagoAlbergueHotelesServiciosKms. Etapa
Rabiño1,20122,90
A Eirexa0,70122,20
Meréns2,50119,70
Arnoia3,60116,00
Ribadavia5,70110,40
San Cristovo3,30107,10
Beade2,30104,80
Caldelas2,80102,10
Berán1,20100,80
23,30
Descripción de la Etapa

Salimos de Cortegada después de un buen desayuno. Después de abandonar los edificios llegamos a una rotonda. Hay que seguir de frente rebasando el vial OU-402 que sube a tu derecha y metiéndote por el camino que se adentra entre los pinos. En 300 metros llegarás a un peto de ánimas, llamándonos la atención, uno de esos pequeños santuarios ubicados en caminos, encrucijadas e iglesias en Galicia y en el norte de Portugal (alminhas), los cuales constituían una manifestación material del culto a los muertos y de la devoción a las ánimas que se procesaba en esas regiones. Ahí gira a la derecha y sigue por la pista. Cuando finalice, cruza la carretera y sigue de frente hasta la iglesia de San Bieito de Rabiño. Deja el templo a tu derecha y, en 400 metros, llegarás a dos pistas de tierra que se meten entre los árboles. Elije la de la derecha. Por delante tienes 700 metros de considerable subida. En la cima, continúa por la pista de tierra que desciende a la izquierda.

En el kilómetros 4,3 llegas a las casas de Merens y tienes una magnífica vista sobre el río Miño. El recorrido por la población de Meréns nos lleva a pasar por la Casa dos Condes de Ximonde o Casa Grande en cuya fachada encontramos el magnífico escudo de Puga Sarmiento, considerado el más grande de Galicia, y que cuenta con 18 particiones, así como de una corona en la parte superior. Al lado, encontramos otro curioso peto de ánimas, y al poco dejaremos a la derecha la iglesia de San Cibrián.

Baja por el camino de la izquierda, pasa por su iglesia y llegarás a una carretera. Cruzala y baja por el camino que verás de frente. En 600 metros llegarás a la orilla del río Miño. Podrás disfrutar de su compañía, entre la sombra de los árboles, hasta el kilómetros 8,4 en el que llegarás al puente sobre el río Arnoia. Cruzado el puente bajaremos a su derecha para pasarlo por debajo e iniciar un precioso recorrido al borde del citado río, afluente del río Miño, y el segundo que le aporta más caudal sólo superado por el río Sil.

Llegamos a la desembocadura donde podemos ver una serie de pequeños islotes, siguiendo por el paseo hasta pasar por unas viñas y algo después, dejando a nuestra derecha la Capela de Nossa Señora del Perpétuo Socorro. Rodeamos las instalaciones deportivas y nos adentraremos en un bonito bosque de robles acercándonos al río Miño y comenzando a encontrar cada vez más viñas.

Este bonito y cómodo tramo nos llevará unos kilómetros, hasta llegar a un punto donde parece que el camino de tierra desaparece, haciendo un giro de 180 º en subida por asfalto para alcanzar la carretera OU-0305 que nos llevará al puente sobre el río Miño, que cruzamos, y que, siguiendo la carretera y tras dos curvas, nos dejará en Ribadavia, a la que accedemos tras cruzar el puente sobre el río Avía. Sin duda que esta localidad merece dedicarle un par de horas, una vez pasada la Porta Nova y entrado en el núcleo antigua de la ciudad, nos situamos ante la iglesia de Santa María Madalena, tomando algo en el bar de la plaza y aprovechando para dejar las mochilas y tomar unas cervezas.

Ribadavia, es una de las ciudades que forman parte de la ruta de las juderías (barrios de callejuelas estrechas donde habitaban concentrados quienes practicaban la religión judía), así que no podíamos pasar por la ciudad sin dejar de pasear por esa zona en busca de símbolos, grabados, detalles y ornamentos relacionados con la cultura hebrea.

Otro lugar imprescindible a visitar, aunque sea desde el exterior, es su castillo y parte de la muralla defensiva, así como la iglesia de Santo Domingo, donde se oficiaba una boda a nuestro paso, así como las de San Xoán, relacionada directamente con el Camino de Santiago y el paso de peregrinos a lo largo de la historia, así como la iglesia de Santiago, al lado del museo etnológico.

Como colofón a nuestro paso por la bonita población, compramos en un pequeño puesto, algunos dulces elaborados según recetas tradicionales de la repostería sefardí. Salimos de la localidad pasando junto a la citada iglesia de Santiago por la rúa Santiago y después por la rúa San Martiño, por donde saldremos del núcleo histórico.

Luego, tomaremos la rúa do Ribeiro hasta llegar al parque de Nova Veronza junto al río Avía, que recorreremos hasta pasar bajo el viaducto de la autopista de la Rías Baixas. Continuaremos más o menos siguiendo el curso del río en dirección a San Cristovo, al que llegaremos cruzada la carretera OU-504 a la altura de un peto de ánimas.

Entramos a la población pasando por su iglesia y dejándola atrás por asfalto para entrar en un bonito tramo donde vamos a encontrar inmensos campos de viñas. Vale la pena echar de vez en cuando la vista atrás para observar la bonita estampa de la viñas.

Pasamos por una capilla, la Capela da Misericordia, donde aprovechamos para hacer una pausa antes de continuar hacia la ya cercana población de Beade, que atravesamos y donde tenemos una bucólica vista de su iglesia de Santa María entre la viñas. A la salida de la población, no hay que perderse su espectacular calvario al lado de la Capela de San Roque.

En Beade, estuvo establecida una de las siete encomiendas que tuvo en Galicia, la orden militar de San Juan de Jerusalén, orden protectora de los peregrinos. A la derecha de la iglesia de Santa María, a la que vale la pena acercarse, encontraremos el arco de entrada de la sede presidido por 3 escudos de piedra, además de encontrarnos con un exclusivo cruceiro coronado por una Cruz de la Orden de Malta, elemento único en Galicia.

Dejamos esta zona monumental de Beade saliendo a la carretera OU-212 que tomamos a la izquierda y que seguimos en ligera subida durante unos 2 kilómetros. Llegaremos a una señal donde se nos indica la dirección Berán-Leiro, que seguiremos y que dejaremos al poco para entrar a un bonito camino entre los viñedos que en subida y después de cruzar un vez la carretera para continuar por el camino, nos dejará en las primeras casas de Berán.

Final de nuestra etapa del día.

Que Ver, Que hacer...

Galería Fotográfica

El camino comienza en el mismo instante en que decides hacerlo